Target Renegade
La segunda entrega de Target: Renegade, que ya no vimos en versión arcade, mejoró en todos los aspectos técnicos a su antecesor: protagonista y enemigos en sprites de alta resolución, música in-game (melodías brillantes de Gary Biasillo, por cierto) y mejores efectos. Eso sí, comparada con la versión para CPC (una de las mejores según los entendidos en esto), le faltaba un modo para 2 jugadores que hubiese disparado la adicción del juego hasta cotas incontrolables. Aún así, es uno de los mejores beat’em ups para nuestra panera. Del argumento no os cuento nada porque es similar al de Renegade: tenemos que rescatar a la chica de turno apartando de nuestro camino a los enemigos a puñetazos, patadas y golpes de bate de béisbol.
En Target: Renegade también contamos con varios tipos de movimientos, al que se añadirá el golpeo con bate de béisbol que “amablemente” pediremos prestado a alguno de nuestros enemigos, o un puñetazo bajo a la altura de las bolsitas de té. De las joyas de la corona. Bueno, ya me entendéis… El bate un arma importante porque amplía nuestro alcance. Aquí también podremos ser enganchados por un rival mientras el otro nos hace una cara nueva a costa de nuestra valiosa energía, pero esta vez nos hará mucho más daño.
Por suerte, contaremos con 5 vidas y recarga de energía al terminar con un enemigo, pero seguiremos teniendo un crono contra el que correr. Un detalle curioso es el de nuestra mirada en la zona inferior de la pantalla, que, aparte de distraernos, nos mostrará nuestro “estado de ánimo” según nos vaya en el juego.
Como decía al principio, Target: Renegade es técnicamente mejor que su primera parte, pero tiene sus puntos negros. Los enemigos no son tan variados, y llegaréis a aburriros de combatir en cada fase contra la misma pareja de moteros, chulo y prostituta, forzudos, etc una vez tras otra antes de llegar al final de la fase. Que vale que están muy detallados, pero son poco diversos. Otro pequeño fallo al que nos acostumbramos pronto es la precisión con la que tenemos que colocarnos en el decorado para terminar con determinados rivales como los moteros o para alcanzar a enemigos con la patada en salto (algo realmente complicado). Y esta vez nos enfrentamos a 2 enemigos a la vez en lugar de los 3 de Renegade, pero se debe a limitaciones de memoria por el uso de sprites en alta resolución sobre coloridos en baja (el famoso overlay). Aunque esto no hace que sea más fácil, al contrario, es más difícil que Renegade. Aún así, es un juego que merece la pena.
Enfundaros vuestra chupa de cuero, poneros unos guantes sin dedos, anudaros una bandana en la cabeza y lanzaros al rescate en este Target: Renegade.
CARÁTULA DEL JUEGO
VÍDEO DEMO
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